EL CAMINO DE SANTIAGO & EL APOSTOL

Escrito por: P.Argenter Leído 28.839 veces.

La devoción por de honrar las reliquias de Santiago “El Mayor” en Galicia se hizo muy popular en edad media. Peregrinos europeos caminaban cientos de días para llegar a Santiago de Compostela para venerar y dar culto al apóstol de Jesús.


Se crearon rutas jacobeas alternativas para llegar a Santiago dentro del mismo camino tradicional, siendo por vía marítima o terrestre. La principal ruta era la conocidísima, llamada la del interior y que atravesaba Navarra, La Rioja, Castilla y León y llegaba hasta la catedral de Santiago. Otra era la costera, que conducía desde la costa del País Vasco hasta Galicia, cruzando Cantabria y Asturias.


Los peregrinos del sur de la península, como los de Toledo, Valladolid o Salamanca, comenzaban por la ruta de la Plata y llegando a Palencia o Zamora, llegaban a Galicia por algunos pueblos de la ruta tradicional hasta llegar al punto final del camino. En el exterior de la península, la ruta francesa comenzaba donde actualmente sigue siendo el punto de partida clásica, Rocesvalles.


Debemos explicar que el tramo aragonés tiene cuatro etapas, que va desde Somport hasta Puente de la Reina. Pasando por Jaca, Sangüesa y Monreal para llegar a Puente de la Reina.


El Camino Francés es el más largo, de más recorrido que va desde St. Jean-Pied-de-Port a Roncesvalles (Navarra) donde se inicia la primera etapa de las 31 existentes.


El peregrino debe llevar una documentación tan importante como el carnet de identidad o la cartilla médica nacional, además de la conocida cartilla del peregrino, para ser sellada durante el camino y así certificar al final del camino su paso peregrino a esta santa tierra; documentarse en todo tipo de cuestiones como son los refugios y sobre todo no olvidarse de un botiquín personal con los medicamentos necesarios y otro para aliviar las molestias típicas del viaje, torceduras, ampollas, rasguños, etc. Y sobre todo llevar prendas y calzado para duros cambios meteorológicos.


LA HISTORIA DE SUS ORIGENES:


En el siglo IX se comenzó a extender la noticia de que el sepulcro del apóstol Santiago fuera hallado en Compostela (Galicia). Pronto las cortes cristianas y la iglesia católica se esforzaron en dar a conocer al pueblo para la salvación eterna se debía ir a Compostela en peregrinación.


Así comenzaron los muchos peregrinos que se encaminaron hacia la tierra de los íberos, en el reino de León, lugar elegido por los seguidores de Cristo para enterrar al apóstol más hispano de todos, al evangelizador de la Hispania Citerior.


Ante aquel bello descrubrimiento, el rey Alfonso II de Castilla mandó la construcción en aquel lugar de una iglesia.


En el año 844 el rey de Asturias, Ramiro I se enfrentó contra los moros, y según se cuenta, el mismo apóstol se le apareció con su caballo blanco y con una espada en la mano, enfrentándose a los enemigos; desde entonces se le conoce como Santiago “Matamoros”. Con el paso de los siglos los reyes de Castilla, León y Navarra- principalmente- se encargaron de proteger a los peregrinos y a establecer grupos de protección para quienes fueran por la península y peregrinar hasta Compostela sin ser atacados. Aunque hubiera enfrentamientos entre los reinos cristianos de la península, los peregrinos de Santiago llegaban tarde o temprano. Así mismo se consideraba al camino de Santiago como uno de los caminos principales para la “Tierra Santa”, considerado junto a Roma o a Jerusalén uno de los lugares santos más importantes del cristianismo occidental.


En el año 1122 el Papa Calixto II proclamó “Año Santo Jacobeo” cada 25 de julio que caiga en domingo, el día santo de la semana. Tras las cruzadas, el camino de Santiago entra en declive y prácticamente pocos son los peregrinos que la transita. Alfonso II de Castilla o El Cid Campeador fueron unos de sus peregrinos más importantes por aquella época. Así como iba creciendo la llegada de peregrinos iban creándose aldeas y poblaciones que se enriquecían de su paso, aunque muchos de ellos eran pobres y prácticamente mendigaban por un sitio para refugiarse del mal tiempo y un poco de comida para poder seguir el camino. Las posadas era junto con los hospitales, monasterios, mercados e iglesias, lugares que acogían a los peregrinos.


Por las rutas del camino de Santiago se fue creando una ruta comercial de considerable importancia, muchos de ellos, buhoneros, mercaderes y artesanos que también se enriquecían.


Pronto la nobleza castellana comenzaría a peregrinar a Compostela, aprovechando los cortos tiempos de paz entre los reinos cristianos de la Península.


El “Liber Sancti Jacobi” (Año:1140) escrito por un peregrino francés, recoge y advierte de los riesgos por los que debían soportar los peregrinos, muchos de ellos sin una seguridad, ya también ellos fueron objeto de robos.


Los primeros refugios de peregrinos datan del siglo XI y en Roncesvalles, el lugar más antiguo que congregó a la mayoría de los peregrinos venidos de Europa, podemos todavía hallar vestigios de aquellos lugares, como St. Salvador, el monasterio-hospital.


LA CATEDRAL DE SANTIAGO APOSTOL EN EL MEDIEVO:


Se comenzó a construir en el año 1075. Su estilo artístico fue el románico, el propio de la época. No es de gran tamaño, característica así mismo del románico español.


Famosos son sus pórticos, como el de las Platerías y el de la Gloria. El conocido arquitecto, el Maestro Mateo fue quien ejecutó la obra, promovida por el obispo Diego Peláez y el rey de Castilla; así mismo don Raimundo de Borgoña y el obispo Gelmírez también lo impulsaron.


La basílica tiene planta de tres naves con tribuna, crucero, girola y en los laterales las capillas ábsidales. Arriba en el techo podemos ver una bóveda de cañón muy hermosa que cubre la nave principal y la bóveda de arista en los laterales. De estilo románico y planta cruz latina, fue una de las catedrales más bellas de las que se construyeron por entonces. Se acabó de construir en 1128 aunque hasta el siglo XVIII se reformó varias veces; incluso podemos ver varios movimientos artísticos dentro del templo. Llama la atención los pórticos como el de la Gloria, la mejor obra del escultor Mateo. Fue creado durante el reinado de Fernando II en 1168. Su tímpano se construyó unos años después en 1188. En el tímpano de este pórtico vemos a Cristo sentado en el centro y rodeado de varias imágenes, como cuatro de sus apóstoles y tal vez, uno de ellos represente a Santiago “El Mayor”. Cristo representa el sufrimiento mostrando sus llagas. Sus portadas: Platerías y Azabachería son obras de arte. Los apóstoles que le acompaña en los laterales son reconocidos como San Juan, San Lucas, San Mateo y San Marcos, “El médico”. Algunas figuras de hombres llamados “Los justos”. Los ángeles que aparecen como elementos sostienen una cruz, una corona de espinas, una lanza, una esponja, etc. Elementos relacionados con la pasión de Cristo antes de su muerte. Otros apóstoles reconocidos en otro de sus arcos son: San Bartolomé y Santo Tomás. El Arcángel favorito de Dios, su mano derecha,


San Gabriel, también aparece en el arco de la derecha. En el arco izquierda aparecen algunos profetas del Antiguo Testamento.


El órgano de la Catedral es del siglo XVIII. Llaman la atención las capillas radiales y las capillas laterales como la de San Andrés, San Antonio, Santa Catalina, la capilla de la Comunión, la de San Juan, la de la Concepción, la de Nuestra Sra. De la Concepción, entre otras por su rica ornamentación.


El panteón real alberga la tumba del conde Raimundo de Borgoña y Galicia, la de la esposa de Alfonso VII, doña Berenguela; la de doña Inés de Castro, el de Fernando II y el de Alfonso IX.


Como uno de los destacados impulsadores de la Catedral fue el obispo Teodomiro con su lápida sepulcral. Su sala capitular y su biblioteca son de gran belleza. No dejar de visitar el museo capitular, la plaza y escalinata del Obradoiro, del siglo XVIII, que llama su atención por su belleza en conjunción con la piedra gris oscura típica de Galicia. Junto a la fachada de la Azabachería se ve la torre del Reloj


TUMBA Y ALTAR DE SANTIAGO DE COMPOSTELA:





Santiago “El Mayor” fue uno de los hijos varones de Zebedeo y de Salomé, ambos de Cafarnaún. Su hermano fue San Juan “El Evangelista”, parece ser fue primo del mismo Jesús además de haber sido uno de los apóstoles más cercanos a él. Santiago fue elegido para evangelizar la Hispania romana y según la iglesia católico, él decidió ser enterrado algún día en aquellas bellas tierras al final del mundo (=Galicia), donde se acababa la tierra, el punto más lejano conocido. Herodes Antipas I mandó decapitarle hacia el año 44 dC, siendo reconocido como el primer apóstol de Cristo en morir por el cristianismo.


Su tumba que fue hallado en el año 813 dC por un ermitaño llamado Pelayo en el conocido Campo Stellae, en una pequeña necrópolis. Corrió a comunicarlo al obispo de Iria Flavia, Teodomiro quien lo describió como los auténticos restos del apóstol. en una pequeña necrópolis.


En la Catedral de Santiago, sobre un camarín ricamente ornamentada vemos la figura románica del apóstol en piedra, sentado sobre un trono. En su mano izquierda sujeta una vara de peregrino, vestido con una capa y con el símbolo de la Orden de Santiago. En la otra mano sujeta un pergamino abierto con unas palabras en latín. La figura de un obispo que sujeta dicho pergamino, pudiera ser el de Teodoromiro. Su cuerpo está recubierta de plata y pedrería del siglo XVIII. No olvidarse que cuenta la tradición, que una vez en el camerino del apóstol se debe besar uno de los hombros e incluso se le puede abrazar. Hay quien solo ponen sus manos sobre la capa del apóstol. Bajo el camarín se haya su sepultura en plata, muy trabajada al puro estilo románico; en ella se guardan sus restos.


Según cuenta, cuando Santiago se hallaba en la zona de la actual Zaragoza de evangelización, halló la figura de la Virgen María. Esa virgen fue posteriormente llamada “Virgen del Pilar”, ya que se aparecía sobre una columna. Es la compañera de viaje de Santiago y en España esta virgen está muy vinculada a la figura del apóstol. Ambos fueron nombrados patrones de este país. En la Catedral esta virgen cuenta con su propia capilla, obra de Andrade y Novoa de 1715.


LA LEYENDA DEL MAESTRO MATEO (1150-1200):


Cuentan que en el lado interno del parteluz del Pórtico de la Gloria de la misma basílica de Santiago, hay una figura de rodillas con el pecho tocando el suelo junto a la palabra “architectus”y es conocido como Santo dos Croques. Dicen que el escultor castellano, el maestro Mateo fue castigado por su soberbia a permanecer eternamente de espaldas a su obra sin poder gozar de su contemplación. Para que el Santo dos Crosques te de más sabiduría o inteligencia, se debía tocar con la cabeza tres veces sobre la cabeza de la figura. Esta figura mira hacia el altar. También cuenta la tradición que se debe colocar las yemas de los dedos en el parteluz.


Para saber más:


WEBS:


www.caminodesantiago.com


www.caminodesantiago.consumer.com


www.xacobeo.es


www.caminodesantiago.org


www.jacobeo.net


www.guiarte.com/caminodesantiago


www.arteguias.com/romanico_santiagodecompostela.htm


www.archicompostela.org


www.roncesvalles.es


www.rencesvals.com


http://cvc.cervantes.es/actcult/camino_santiago/primera_etapa/roncesvalles/


http://www.santiagodecompostela.org/ (Ayuntamiento de Santiago de Compostela)


www.compostelavirtual.com (turismo)


www.santiagoturismo.com (turismo de Compostela)


LIBROS:


-Guía práctica del peregrino- El Camino de Santiago- por Millán Bravo Lozano.


-Guía del Camino de Santiago a pie- por José Manuel Somavilla.


-Galicia- Guía Total- Anaya Touring Club-


-Catedrales de España- de Carlos Sarthou Carreres y Pedro Navascués Palacio.





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